Cuando se vive en una zona donde las heladas son frecuentes hay que buscar plantas que sean capaces de soportar esas condiciones, y te puedo asegurar que si eres un amante de las crasas no encontrarás otra más resistente que la Sempervivum tectorum.
Se trata de una especie que, además de no sufrir daño alguno con el granizo ni con la nieve, aguanta también el calor si tiene suficiente agua. Así que, ¿a qué esperar para comprarlo?
Sempervivum tectorum es el nombre científico de una especie originaria de los Pirineos, Alpes, Apeninos y Balcanes. En la Península Ibérica también la podremos encontrar fácilmente en altitudes altas. Popularmente se la conoce como coronas, hierba de todo el año, siempreviva, siempreviva mayor, o yerba puntera. Fue descrita por Carlos Linneo y publicado en Species Plantarum en el año 1753.
Se trata de una planta cuyas hojas crecen formando una roseta de unos 3-4 centímetros de altura. Tiene mucha tendencia a sacar retoños de las mismas raíces, de ahí que resulte muy interesante para cubrir pequeñas áreas o macetas que son más bajas que anchas. Florece en primavera.
Su cultivo y mantenimiento es perfectamente apto para principiantes. Pon tu ejemplar en semisombra, riégalo unas dos veces por semana y te puedo asegurar que tendrás Sempervivum tectorum para dar y regalar durante años. Eso sí, no te olvides de abonarlo durante la primavera y el verano y de, en caso de tenerlo en maceta, pasarlo a una maceta mayor cada tres años con el fin de que pueda continuar creciendo y volviéndose más y más bonito.
Por el tema del frío no te preocupes, puesto que aguanta heladas de hasta los -10ºC; lo único que no le gusta tanto es la calor, pero no sufre si se protege del sol directo y se va regando de tanto en cuando.
Que disfrutes de tu siempreviva.